La historia de Bodegas El Lagar de Isilla y de sus vinos comenzó en el año 1995 en la Ribera del Duero. Todo empezó en la bodega histórica del siglo XV ubicada debajo del restaurante El Lagar de Isilla de Aranda de Duero. Allí, a 12 metros de profundidad, la familia Zapatero Pinto, elaboró las primeras 3.000 botellas de un vino que hoy ya es una referencia con sus 250.000 botellas de producción anual.
En la actualidad se elaboran vinos tradicionales como el joven, crianza y reserva, así como vinos más modernos como vinos de paraje y de pueblo donde tratamos de identificar el vino con el territorio. También hemos puesto en valor el albillo mayor, una uva tradicional de toda la vida en la Ribera del Duero llevada a toda su expresividad.